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Despertar una mañana y ver que todo es diferente, que me siento mucho más fuerte más libre. Cerrar los ojos y respirar el aire puro, la brisa que me azota en la cara.

Estirar los brazos muy altos y sentir que la libertad se ha apoderado de mi.

Gritar muy fuerte que me siento libre, que me siento mujer, gritar que soy feliz siendo quien soy.